Gracias a Vos cumplí mi fantasía...

oso blanco · 15 de Abril del 2015

Estuve pensando un rato largo que título ponerle a este post y, por más vueltas que le di al asunto, solo se me ocurrió agradecer desde el inicio.

Paso a contar el porqué de mi agradecimiento.

Gracias a un forista destacado (Así denomino a los que tienen una larga trayectoria dentro del Foro) a primeras horas del día pude cumplir una de mis, últimas, fantasías.

Una fantasía que hace casi dos años viene rondando en mi cabeza.

En realidad, hace correr los ratones dentro de mi cabeza, jajaja.

Y era la siguiente.

Encontrar un masajista que pudiese realizar su trabajo frente a dos personas que nunca se vieron, o sea, que no se conocen físicamente y el único contacto se debe al intercambio de algunos pocos mensajes u opiniones en el foro.

Ni camarita, ni Skype, ni fotito privada… Nada!

Casi, casi, como una verdadera Cita a Ciegas… Y como se desarrollaría mi fantasía?

El masajista iniciaría su tarea sobre la otra persona, prescindiendo de mi presencia.

Todo se desarrollaría con la naturalidad de dos que están a solas, con su intimidad.

Yo, en principio, como un simple voyeur, observaría como se dejan de lado las prendas y se ponen en posición los cuerpos desnudos, como en una línea de largada.

Sentiría en mi piel el calor que se va generando en el lugar; la excitación de cada uno de los participantes; sentiría las respiraciones agitarse; el roce de las manos sobre los cuerpos desnudos; vería la erección de los penes, como indicadores inequívocos del placer que se genera entre ambos…

Y conforme avanza ese encuentro de cuerpos, y mi excitación, me sumaría a ellos dispuesto a disfrutar de lo que ambos han generado.

Muy simple mi fantasía… pero así y todo, difícil de coordinar y realizar.

Se hacía difícil encontrar a un perfecto extraño…

Hasta que un día, no hace mucho, y luego de unos pocos mensajes, al enterarse de ella, mi nuevo amigo del foro, se ofreció para ser parte y hacerla realidad y entre ambos encontramos al masajista que conocíamos por separado y podría ofrecer sus servicios.

Y llegó al día. HOY, fuimos puntuales.

Por mi ansiedad, llegué apenas unos minutos antes y esos minutos previos lejos de ayudarme me jugaron en contra, porque mis nervios seguían en aumento... jajaja.

Hasta que lo vi llegar, seguro de sí mismo, confiado, y al igual que yo, bastante nervioso.

En nada su imagen se asemejaba a la idea que me había hecho de él… La gran coincidencia, creo que, a él le sucedió lo mismo, estoy seguro…jajaja. (Aún no pudimos hablar sobre ese instante)

Daniel. Así se llama el masajista, un joven con amplia experiencia pero que, confió luego, también estaba algo tenso, dado que, una cosa es que lo visite una pareja que se conocen entre sí y terminan realizando un trío o lo que surja y otra cosa son dos perfectos extraños que no se sabe con certeza como podrían reaccionar al conocerse en ese mismo momento.

Pero, por suerte, para los tres, no solo hubo aceptación mutua sino que luego de calentarme en extremo, al ver esos cuerpos desnudos, frotarse, acariciarse, hurgar en sus orificios y aferrarse mutuamente las pijas, darse intensos besos con lenguas que parecían querer atravesar sus gargantas. La puesta de espaldas y ver como la pija de uno hurgaba intentando llegar más allá de lo posible como queriendo fundirse en la profundidad del otro.

Sin poder aguantar más, debido a las imágenes frente a mí, a los gemidos de ambos, me acerqué y ofrecí mi boca y como si hubiese apretado un botón disparador sobrevino el descontrol del placer y nos enredamos en un hermoso trío, donde cada uno, hizo y deshizo a su gusto lo que quiso, donde nos penetramos, chupamos, besamos, abrazamos y todos los “amos” que se les puedan ocurrir…

Es por eso que, luego de una mañana muy intensa plena de SEXO y placer… solo se me ocurre decir: Gracias.

Al despedirnos acordamos que yo escribiría sobre la experiencia, lo que no le pregunté, ni me aclaró, es si podría escribir su nombre (Avatar) en el relato.

Ojalá, aporte lo suyo y de su visión y vivencias del momento vivido…

Tulipán · 15 de Abril del 2015