A ver, ni muy muy ni tan tan.
Y digo esto habiendo pasado una xp cercana a la muerte hace unos años.
De todo se aprende.
Pero la realidad es que somos hombres, y por tanto proclives a ser esclavos de la testosterona. Más los que somos solteros, sin ese plus de seguridad que supone vivir de trampa. Y quién no se ha sentido desbordado de la calentura alguna madrugada y dicho "ma sí, lo invito", sin pensarlo demasiado, luego de quedar al palo con una pija XL o un culo de ensueño.
Así que, que el que esté libre de pecado que tire la primera piedra.
Lo del telo suena bien en la teoría, pero tampoco es la panacea. Más en esta crisis, donde cada mango cuenta.
Creo que antes del extremo de invitar a un fisura a tu casa hay pasos previos para garantizar un piso de seguridad: 1) encontrarse en una esquina. 2) llegar antes para comprobar que viene solo. 3) abortar si el otro no quiere pasar celular u otro medio de contacto (ni hablar si no quiere pasar foto de cara, Ahí rajÁ!!!). 4) abortar si, aunque aparentemente esté todo en regla, uno percibe algo raro, ya que por lo general esos instintos son bastante certeros.