Ver pasar la vida...

[Adel]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Espero poder adaptarme a lo que me depara el destino, desde lo afectivo no hago ningun tipo de previsión pensando en el mañana, vivo hoy y actuo segun mis sentimientos...No me involucro con la gente pensando que de viejo no voy a poder limpiarme el orto... A lo unico que temo es a no poder valerme por mi mismo, el resto se vera..

[barbarojaar]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Muy buena la experiencia, es bueno que muchos nos sinceremos y empecemos a contar como empezamos.

[Invitado el_carcelero]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

YO NO ME VOY A QUEDAR SOLO.

 

Es más, si tengo que ir al cementerio a hablarle a las tumbas de mis afectos muertos, hablaré a las tumbas.

 

El 50% es cuestión de actitud.

 

A pesar de todo lo anterior, la soledad puede ser una gran amiga, si te sabés entender con ella.

[Invitado Nicarod]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Amo estar solo y me da un "no sé qué" pensar que luego de tantos años conviviendo con otras personas (en familia, trabajo, edificio, etc.) debiera además terminar dias en sociedad. Es más: estoy buscando alguna cueva en alguna montaña para hacerme anacoreta.

[Seychelles]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Me parece todo relativisimo! . gay, hetero, lindo, feo??? no hay garantias.

 

Lo mejor es sembrar... una pareja que te rompe las pelotas es una tortura peor que la soledad.

 

En mi caso me he sentido solo toda la vida, estando solo o en pareja, algunas veces mas que otras, a veces estando rodeado de mucha gente, los hijos tampoco nos pertenecen. por lo tanto la soledad no me asusta para nada es mas me he amigado con ella y frecuentemente la visito y tomamos unos mates.

 

Hace un tiempo me di cuenta que la soledad, la paz y la felicidad no dependen de las condiciones exteriores, sino de lo mas profundo de nuestro ser. esto que parece un pensamiento trillado para mi no lo es porque realmente lo creo y lo practico.

 

Tambien aprendi que hacer proyecciones futuras es algo sin sentido, mañana no sabemos que nos depara.... aprendi que hay que comprometerse con el hoy y lo que venga vendra.

 

Nadie tiene el control absolutamente de nada en el exterior, en el pasado, ni en el futuro, entonces para que hacernos problema por eso? , lo unico que podemos modificar es nuestro interior, hoy no tengo pareja pero no me siento solo, al menos me siento mucho mejor que muhcas veces de las que he estado en pareja... por lo tanto amigos no creo que sea bueno fijarse en el fin del camino sino en el camino y tampoco creo que haya que preocuparse por el futuro sino por el presente y brindarnos en el hoy.

 

Pensar en como terminaran sus dias o como sera su futuro es una idea mental no lo que va a pasar, con toda seguridad las cosas que pasaran seran distintas a las que su mapa mental les dice, no se si seran mejores o peores pero seran distintas, no se hagan problema por eso mejor preocupense por el dia de hoy.

 

Quizas les parezcan frases hechas pero como les dije estoy convencido de lo que puse y si piensan lo contrario me chupa un huevo, hoy estoy en paz...

 

Saludos

 

 

Guauuu!

 

Mendo, creí que nunca iba a coincidir con vos en un post de manera tan integral.

 

Muy buena reflexión de 'higiene mental'.

[Invitado MACHOGUACHO]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Yo imagino la vejez como un tiempo de cosecha. Los que me leen de hace tiempo, saben el porqué de estas asociaciones.

 

La cosecha no significa necesariamente tener más. Significa principalmente, percibir los frutos del trabajo arduo.

 

Uno puede estar solo o acompañado cuando llega a viejo. La mayor parte de las personas (sean heterosexuales u homosexuales) están solos en su vejez. No importa la cantidad de hijos o de dinero que hayas generado. La vejez es un destino de soledad. Una soledad que permite reencontrarse con uno mismo, reflexionar sobre lo que hicimos con el tiempo que nos fue dado y disfrutar o resentir los resultados.

 

Yo creo que mucho más importante que estar acompañado cuando sos viejo, o tener la capacidad económica para pagarte el geriátrico, es la actitud de apertura y optimismo que se logró cultivar para enfrentar nuevas situaciones. El optimismo (de importancia vital en medio de un entorno pesimista como es la vejez) en la espera de lo que vendrá.

 

La vida es nuestro tiempo de siembra. La vejez, nuestro tiempo de cosecha.

Imposible recolectar aquello que no sembramos. Imposible encontrar cariño, si en nuestro corazón prevaleció el odio. Imposible encontrar unión, si sembramos desencuentro.

 

La riqueza de la vejez se encuentra dentro del propio corazón del anciano. Quizás por eso haya ancianos tan alegres a pesar de la soledad y otros tan amargos, a pesar de la compañía.

La diferencia reside en el interior de cada uno. En lo que supo construir.

Editado 29 de Septiembre del 2009 por MACHOGUACHO

[branleur]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Parejas Venecianas- Arturo Pérez Reverte

Nunca antes me había fijado en la cantidad de parejas homosexuales que se ven paseando por Venecia. Los encuentras caminado por los puentes, a la orilla de los canales, cenando en los pequeños restaurantes del casco viejo. No suele tratarse de dúos espectaculares, sino todo lo contrario: gente discreta, tranquila, a menudo con aspecto educado. Mirando a los demás aprendes cantidad de cosas, y en el caso de estas parejas siempre me encanta sorprender sus gestos comedidos de confianza o afecto, el reparto convencional de roles que suele darse entre uno y otro, la ternura contenida que a menudo sientes flotar entre ellos, en su inmovilidad, en sus silencios.

 

Pensaba en todo eso el otro día, a bordo del vaporetto que cubre el trayecto de San Marcos al Lido. Sobre la laguna soplaba un viento helado, los pasajeros íbamos encogidos de frío, y en un banco de la embarcación había una pareja, hombre y hombre, cuarentones, tranquilos. Se sentaban muy juntos, apoyado discretamente un hombro en el del compañero, en un intento de darse calor. Iban quietos y callados, mirando el agua verdegris y el cielo color ceniza. Y en un momento determinado, cuando el barco hizo un movimiento y la luz y la gama de grises del paisaje se combinaron de pronto con extraordinaria belleza, los vi cambiar una sonrisa rápida, fugaz, parecida a un beso o una caricia.

 

Parecían felices. Dos tipos con suerte, pensé. Aunque sea dentro de lo que cabe. Porque viéndolos allí, en aquella tarde glacial, a bordo del vaporetto que los llevaba a través de la laguna de esa ciudad cosmopolita, tolerante y sabia, pensé cuántas horas amargas no estarían siendo vengadas en ese momento por aquella sonrisa. Largas adolescencias dando vueltas por los parques o los cines para descubrir el SEXO, mientras otros jóvenes se enamoraban, escribían poemas o bailaban abrazados en las fiestas del Instituto. Noches de echarse a la calle soñando con un príncipe azul de la misma edad, para volver de madrugada, hechos una mierda, llenos de asco y de soledad. La imposibilidad de decirle a un hombre que tiene los ojos bonitos, o una hermosa voz, porque, en vez de dar las gracias o sonreír, lo más probable es que le parta a uno la cara. Y cuando apetece salir, conocer, hablar, enamorarse o lo que sea, en vez de un café o un bar, verse condenado de por vida a los locales de ambiente, las madrugadas entre cuerpos Danone empastillados, reinonas escandalosas y drag queens de vía estrecha. Salvo que alguno -muchos- lo tenga mal asumido y se auto confine a la alternativa cutre de la sauna, la sala por, la revista de contactos y la sordidez del urinario público.

 

A veces pienso en lo afortunado, o lo sólido, o lo entero, que debe de ser un homosexual que consigue llegar a los cuarenta sin odiar desaforadamente a esta sociedad hipócrita, obsesionada por averiguar, juzgar y condenar con quién se mete, o no se mete, en la cama. Envidio la ecuanimidad, la sangre fría, de quien puede mantenerse sereno y seguir viviendo como si tal cosa, sin rencor, a lo suyo, en vez de echarse a la calle a volarle los huevos a la gente que por activa o por pasiva ha destrozado su vida, y sigue destrozando la de los chicos de catorce o quince años que a diario, todavía hoy, siguen teniéndolo igual que él lo tuvo: las mismas angustias, los mismos chistes de maricones en la tele, el mismo desprecio alrededor, la misma soledad y la misma amargura. Envidio la lucidez y la calma de quienes, a pesar de todo, se mantienen fieles a sí mismos, sin estridencias pero también sin complejos, seres humanos por encima de todo. Gente que en tiempos como éstos, cuando todo el mundo, partidos, comunidades, grupos sociales, reivindica sus correspondientes deudas históricas, podría argumentar, con más derecho que muchos, la deuda impagada de tantos años de adolescencia perdidos, tantos golpes y vejaciones sufridas sin haber cometido jamás delito alguno, tanta rechifla y tanta afrenta grosera infligida por gentuza que, no ya en lo intelectual, sino en lo puramente humano, se encuentra a un nivel abyecto, muy por debajo del suyo. Pensaba en todo eso mientras el barquito cruzaba la laguna y la pareja se mantenía inmóvil, el uno contra el otro, hombro con hombro.

 

Y antes de volver a lo mío y olvidarlos, me pregunté cuantos fantasmas atormentados, cuántas infelices almas errantes no habrían dado cualquier cosa, incluso la vida, por estar en su lugar. Por estar allí, en Venecia, dándose calor en aquella fría tarde de sus vidas.

[Invitado jemecarl88]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Tengo 21. Intento no pensar en eso,aunque a veces se me cruza por la cabeza la idea de terminar solo y me da miedo! Peeero uno nunca sabe las vueltas de la vida..

Lo unico que se es que la vIda que llevo ahora,es la que quiero tenes ahora! Soy feliz Y NO CREO QUE ALGUN DIA ME ARREPIENTA DE ESTO! :048:

[rico_tipo]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Chapita, vos lo estás dejando solo. Tiene esposa e hijos? y? no debe ser difícil entrar y decir que lo vas a visitar. Nosotros mismos nos estamos dejando solos, somos egoistas por naturaleza. No sé ese señor cómo habrá sido en su juventud, quizás alguien parecido a cualquiera de nosotros, pero, se merece que alguien que conoció por cerca de un año se apiade de él con solo verlo por una ventana? Seamos solidarios y es posible que, de esa manera, no quedemos tan solos al final de la vida-

[Eternotesoro]

Respuesta: Ver pasar la vida...

 

Uno puede estar solo o acompañado cuando llega a viejo. La mayor parte de las personas (sean heterosexuales u homosexuales) están solos en su vejez. No importa la cantidad de hijos o de dinero que hayas generado. La vejez es un destino de soledad. Una soledad que permite reencontrarse con uno mismo, reflexionar sobre lo que hicimos con el tiempo que nos fue dado y disfrutar o resentir los resultados.

 

De la exquisita y sentida reflexión dispuesta por Machoguacho extraigo esta frase que resume - a mi juicio - lo que es la vejez. Puede que cada uno de nosotros le otorgue un significado particular a esta etapa en relación con las experiencias vividas por/con familiares o conocidos. Considero que es la misma sociedad, en su afán de mantenernos "siempre plenos" - la que le imprime un perfil melancólico, abúlico a la ancianidad.