Humilde obsequio para los viejos compañeros

[nicomar]

Diciembre de 1999.

 

La presentación de un disco siempre supone un hecho placentero, y esta no fue la excepción;

Estoy saliendo del lugar lleno de humo y hace mucho calor para esta hora, son casi las 3 AM cuando llego a la avenida Juan B Justo desde el norte, cosa rara para quien intenta volver para Belgrano, es curioso. Una vez del otro lado de la vía la noche revela una propuesta diferente, desconocida para mí, a excepción de alguna fugaz pasada en auto y acompañado, atento y sonriente a pesar de la clásica broma facil de los amigos, burlones y probablemente curiosos. Esta vez es diferente, es diciembre, hace calor y llevo buena ropa; 2 ó 3 copas de vino y todo el tiempo del mundo, ya sábado y ningún final por delante.

Doy pasos ligeros, liviano, como suspendido en el aire sobre la vereda, mientras un mar de autos desproporcionado inquieta en un inexplicable sinfin la calle Godoy Cruz, sin distraer en absoluto mi atención. A los lados de la calle puedo adivinar las siluetas de futur@s amores y desamores, experiencias por vivir y olvidar.

Doblo por Costa Rica y otra vez por la calle Oro, hacia Santa Fe; el recuerdo es casi completamente ficticio a propósito de aquella noche, excepto el contacto inaugural, 2 calles antes de la avenida; mirada que permanece guardada y perdida para siempre: hacemos algo?, no, gracias.

 

 

Julio de 2000

 

Hoy la mano me duele más que otros días; debe ser la humedad, o tal vez extraño un poco a Laura, cosa rara, ya que me recuerdo muy seguro al terminar la relación, pero al final, es igual; En todos los casos es una verdadera tristeza, una calamidad propiamente cuando el amor acaba; no importa demasiado de que modo...

Me duele; voy a tener que dejar de boxear, pero es que me gusta tanto; si mi padre no me hubiera llevado al Borda y yo no hubiera conocido nunca a todos esos ex boxeadores nunca hubiera estudiado medicina. Federado desde los 18, 36 peleas amateur, 30 victorias, 2 derrotas, 4 empates; 21 definiciones antes del límite en la categoría de los 74 kg; lo que hubiera soñado más de un olímpico.

 

Creo que soy feliz; me gusta mi trabajo, mucho; mis pacientes me quieren y yo a ellos; en unos años voy a ser un buen ortopedista.

 

En otro orden de cosas, ando con muy buena suerte en amores,por así decirlo; me había olvidado lo bien que me iba con las mujeres después de 4 años de respetuoso noviazgo.

 

 

Agosto de 2000

 

Habré elegido el lavadero de Palermo por azar? No lo sé; el asunto es que salí de allí, con la firme convicción de que hoy era el día; saltar la tranquera, cruzar el último umbral; jamás imaginé que sería solo el principio. Decidí tomarme la noche para mí solo, sin amistades inoportunas que vinieran a entorpecer aquella noche perfecta, el paso a la acción, la forma inequívoca, prefigurada ya en mis pasos previos.

Unas cuantas vueltas al querido circuito de aquellos días, todo tensión y éxtasis y allí, sobre Oro a mano izquierda, en esa pequeña plazoleta mínima la vi; y me animé... como es, explicame, donde vamos...Como en un sueño, estoy dentro de un cuarto, en un dpto del abasto; ella es rubia de piel morena como todas las dios@s del norte y no termina nunca de mirarse en un espejo lateral del ropero, que la duplica como si no me bastara con una sola para la primera vez. Es una reina de curvas firmes y seguras y yo no puedo quitar la vista de su cola que más de una vedette desearía lucir.

Crema hinds y va, besos posiciones, todo en su cama y en mi primera vez; casi nos quisimos; no me molestó que sacara lo suyo y se tocara, yo solamente queria besarla y amarla; le pedí que se protegiera, para no salpicarme ya que me hubiera disgustado, y preferiría no hacerlo.

 

 

Agosto de 2002

 

Poco más de 2 años, y si me vieras papá, qué buen medico salí, parece que tengo una facilidad barbara dicen mis jefes, algo natural como vos con los autos. Nunca te agradecí que me alejaras del boxeo viejo, y ya nunca lo voy a hacer.

 

 

septiembre 2002

 

Hace mucho frío, raro a esta altura del año, qué va a hacer.

Pero a mí poco me importa. Estoy amaneciendo junto a una hermosa travesti, en su casa, sitio intimo, mínimo, céntrico en el que no recibe según dice (clientes), poniendome los pantalones para ir por facturas. La salteña prepara el mate con una dedicacion de casada feliz, y es la segunda vez; no me siento contrariado, ni me hago preguntas, solo me dejo vivir, como cuando te tiran un pase demasiado largo y lo dejas ir, sin apenas insinuar un pique.

Es una escultura, no pierde dignidad con los movimientos; timidamente corro la tanga después de los mates para encontrarme una vez más con ella, a la luz del día, tan feliz, tan extrañado, ella dispuesta como el que más y la tanga puesta, siempre.

 

Después vinieron otras, muchas otras; algunas creo haberlas soñado, incluso una extrañísima y no menos real experiencia en el Gondolín, donde la mano se puso fulera. Es muy curioso como se combinan las memorias y olvidos, gnerando un nuevo género, tan ficcional como el anterior.

 

Celeste, recién legada y sin senos, luego con senos, y venite a casa pero "trae galletas" y todavía con las tangas puestas, y después Diana y mis primeros acercamientos, tímidas caricias, hasta descubrir la suavidad de sus detalles menos femeninos, y las tangas ya habían caído hace tiempo, casi accidentalmente, naturalmente, sin estridencias.

Bianca, que te confundí con Gaby, y una vez en el auto, ya se sabe, uno es un caballero y resulta que vengo a descubrir un amor que me viniera a acompañar por tantos años; momentos puramente físicos como Daniela y tantas cacerías frustras, o peor momentos que prefiero no traer.

 

 

Noviembre 2002

 

En pocos días cumplo los 30, y al postre, me caso con Vero; la amo, mucho; voy a tener que ir dejando de embromar.

 

 

Marzo 2003

 

Luna de miel y veraneo todo en uno. Eché un poco de panza, pero el lunes vuelvo al entrenamiento en la federación.

 

 

Agosto 2004

 

Hoy es la misa de papá. Quisiera estar mucho mas triste, y sé que lo estoy, pero la noticia del embarazo de Vero esta semana viene a diluir la pena, inoportunamente.

 

 

Diciembre de 2004

 

El embarazo va como violin, tengo buen SEXO con mi esférica mujer y no he dejado a mis chic@s, no vaya a creer...

 

 

Noviembre de 2006

 

Padre, marido y aun cazando, cada vez que puedo; es cierto que con el estado actual de las cosas he perdido la mística, la esencia de lo que para mí ha sido en estos años el nervio del asunto, el absoluto, que solo se presenta más allá de la noche, cruzando la puerta de lo contractual, íntimos, amanecidos ante posibilidades infinitas, amando a más de una, dos, como sea, sin pedir permiso; pero elijo estar con mi familia, es así, es racional la elección, la alternativa es querer vivir todas las vidas y no encuentro esa posibilidad.

No hubo la necesidad de cuestionamiento alguno; no , de ningun modo hizo falta; veinte años de vestuarios y más de treinta de vida alcanzan para prefigurar mis preferencias: chicas y chic@s; confieso para tranquilizar a los más ortodoxos que si en alguna ocasión me hubiera sentido atraído por algún hombre, se imaginan, pero jamás ocurrió tal cosa

 

 

Diciembre de 2008

 

Atrás quedaron centenares de cuartos de hotel, creo que decenas de noches en departamentos propios o ajenos, y algunos amores; no es poca cosa...

 

Todavía hoy me veo entrando a tu departamento en la calle Cabello, discreto, ansioso por tocarte y vos que te das vuelta y me decís "te estoy provocando" como si hiciera falta, como si los movimientos de tu cuerpo en el ascensor fueran condición para algo, y yo sentado en tu cama reconociendo por un momento el milagro, queriéndote callado mientras te pintas y te arreglas repetida en el espejo; y qiuero decirte cosas muy tontas, como que te quiero, o te amo, no lo se; seguramente los científicos dirán que tengo una enfermedad, los psicólgos darán cuenta de no se qué cosa ocurre con el objeto de deseo y las amas de casa ahorrarán en costosos tratamientos declarando de modo liso y llano que "habría que matarlo"; pero da igual, porque nunca te voy a decir nada, y ahora se que hice mal, que debería haber dicho algo, algo que detuviera por un instante el universo, un mínimo instante para que vieras mis ojos duplicar tu sonrisa, casi feliz, hoy lejos y extraña y tan sin mi.

 

 

Saludos.

Nico.

Editado 10 de Diciembre del 2008 por nicomar

[debolichenboliche]

Respuesta: Humilde obsequio para los viejos compañeros

 

Nico, alguna de tus frases parecen imagen viva de momentos pasados.

De deseos, de frases calladas, de miradas ilusionadas.

De confianza, de afecto, de lealtad.

De placer, de tristeza, de celos, de nada...

 

Desde hace mucho me he lo he planteado:

 

la alternativa es querer vivir todas las vidas y no encuentro esa posibilidad.

 

Puedo decir que he pasado maravillosos momentos con estas chicas y hasta me siento orgulloso que alguna me eligiera o fuera de su preferencia ofreciéndome su plena confianza y lealtad.

 

Pude haberme esforzado más por ellas, creo.

 

Gracias por el momento que reviví a leer algunas de tus lineas.

 

Salu2

[Invitado alberto vega]

Respuesta: Humilde obsequio para los viejos compañeros

 

Nicomar, un placer leerte y gracias por compartir estas palabras, que despiertan en mi, viejos recuerdos de sentimientos compartidos por estas niñas tan especiales.

Mis mas sinceros saludos

AV.

[JHOLMES]

Respuesta: Humilde obsequio para los viejos compañeros

 

Quien pudiera...como la Veronica de la canción del salmón, vivir una vida diferente cada día.

Saludos, Nico

[Red Neck]

Respuesta: Humilde obsequio para los viejos compañeros

 

Hola Nico,

 

Todavia me acuerdo antes de mi casamiento haya por el '96, pensaba a mi mismo de lo que me hiba a perder...no mas aventura y adrenalina de estar ambulando hasta altas horas de la madrugada a la expectativa de cada "esquina".

Te felicito por el relato, me siento altamente identificado.

 

RedNeck