El próximo domingo elegimos presidente.

21 de Noviembre del 2015

Estoy contento. El domingo tengo que elegir a mi próximo presidente.

Me gusta votar. Me gusta elegir presidente.

Creo que va a ser positivo para nuestro país un cambio.

Estoy convencido de que no debería haber existido un "matrimonio presidencial". Creo que fue muy malo para la sanidad democrática de nuestro país. Ni mucho menos que haya durado 12 interminables años.

Además me gusta por los candidatos que hay.

No hay un "Sciolismo" y no hay un "Macrismo". Esto me alegra mucho.

No me gustan los personalismos. Estoy harto de "peronismo", de "kirchnerismo", de "menemismo".

Solo espero que nuestro país deje de ser un paria entre las naciones del mundo.

Que nos integremos al mundo.

Que dejemos de ser ignorados o vistos como "los locos inexplicables de sudamérica". Los poco confiables.

Me gustaría un país con seguridad jurídica. Sin inflación. Con respeto por los derechos humanos de todas las generaciones, pasadas, presentes y futuras. Sin desnutrición. Con plena libertad de prensa. Con un gobierno que no baje línea de pensamiento al pueblo. Con educación de primera calidad pública. Con salud de primera calidad pública.

Un país que crezca, pero en serio. Y para todos.

Un país que se distinguiera en el mundo por la calidad de algunos de sus productos. Por la calidad de su gente.

Un país que fuera lo que fue la Argentina hace 100 años, cuando los emigrantes europeos preferían venir a la Argentina antes que a los Estados Unidos, porque les parecía que a nuestro país le iba a ir mejor.

Me gustaría algún día llegar a ver a otro presidente que fuera un estadista respetado mundialmente, como en su momento fue el Dr. Arturo Frondizi.

Quisiera un presidente que una vez concluido su mandato, pudiera salir de su casa caminando y que la gente lo saludara con respeto y amablemente. Que se hubiera sabido ganar el respeto y el cariño de la gente, como fue el caso del Dr. Arturo Illía.

Y estoy contento de que se acabe esta etapa tan crispada y donde todos nos hemos dividido binariamente.

Porque estoy harto de odiar a los que no piensan como yo. Estoy harto de sentirme un miserable por putear a un cáncer que no fue.

Porque me gustaría sentirme orgulloso de algo que hiciéramos nosotros, los argentinos, y que fuera un poco más trascendente para la humanidad que una gambeta de Messi. O un logro un poco más colectivo y no tan individualista, como el gol a los ingleses hecho con la mano por Maradona. Sí, ya se... También tenemos un Papa argentino. Pero uno en dos mil años, tampoco es para andar fanfarroneando mucho. Si fuera para tanto, Italia sería el mejor país del mundo. Y dista mucho de serlo, por cierto.

Me gustaría un país en el cual no sospechara que estamos gobernados por unos ladrones descarados, que no hacen nada pensando en la gente, sino que solo piensan en ellos mismos.

Un país donde los gobernantes no hicieran solo un poco de bien, y esto con el único objetivo de tener así la posibilidad de seguir robando al Estado.

Un país donde no me lamente porque mi presidente sea una persona ignorante y que encima nos trata de tomar a todos de imbéciles mintiéndonos descaradamente desde detrás de un atril. O donde mi presidente hable de algo que no sea siempre de si mismo. Un presidente que si me dice que es abogado, yo le crea.

Un presidente que vuelva a parametrizar a nuestro país dentro de los parámetros de la lógica.

Un presidente que no me cuente una realidad que no existe, sino que me hable con la verdad.

Un país donde su presidente no fuera un demagogo que se alegrara por repartir subsidios, sino un estadista que se alegrara por desarrollar al país generando puestos reales de trabajo y no falsos trabajos disfrazados de "subsidios" y de "planes sociales".

Un presidente que fuera un buen y leal administrador. Que en lugar de que los argentinos copiáramos de los yankees el ponernos la mano derecha sobre el corazón cuando escuchan el himno, me conformaría con que a los períodos presidenciales les llamáramos "la administración" y no "el gobierno", como ellos llaman a "la administración Clinton", o la "administración Bush", o la "administración Reagan", por ejemplo.

Que en nuestro país los diputados y senadores se eligieran por distrito e individualmente, y no formando parte de listas sábana, de manera que todos sepamos quiénes son, dónde y cómo viven. Y que cuando votaran algo en el Congreso que nos perjudicara, pudiéramos ir a golpearles la puerta para pedirles explicaciones. Como a cualquier vecino.

No es que sea un inocente yo. No se confundan.

No espero que esto pase a partir del 10 de diciembre próximo.

Pero si espero que nuestro país se encamine en este rumbo. Que algún argentino, alguna vez, pueda ver lo que hicimos y diga : "¡Qué bien! Lo que hemos hecho con nuestro país... ¡qué orgulloso estoy del país que hemos sabido hacer!" y que esto sea compartido como opinión por el resto de los argentinos y por el mundo, no solo por unos pocos que miran a nuestro país a través de los ojos de su fanatismo ignorante.

Como les dije al principio : Estoy contento. El domingo tengo que elegir a mi próximo presidente.

Editado 21 de Noviembre del 2015 por Juli Stefa

Adrianito · 21 de Noviembre del 2015