El grupo A!!! El grupo A??? jajjajajajaj

[nachonacho]

“son una máquina de impedir” dijeron ya en 2009 rossi y pichetto Al analizar la magra labor parlamentaria Clarín se olvida del extinto Grupo A

El diario de Noble carga sobre el oficialismo la responsabilidad por la poca actividad en el Congreso, aun cuando la oposición era mayoría.

La renovación de bancas surgida de las elecciones generales del pasado 23 de octubre promete sacar al Congreso del letargo en que se vio sumido durante los dos últimos años cuando la oposición ganó terreno en ambas Cámaras tras las Legislativas de 2009. La paridad de fuerzas en el Parlamento, sumada a la agresiva agenda que buscó imponer el ya extinto Grupo A, incluso pasando por encima de sus atribuciones de modo de asestar un golpe al gobierno de Cristina Fernández, se encuentran entre las razones que pueden explicar la caída en la cantidad de leyes aprobadas con respecto a años anteriores.

No obstante, a la hora de intentar dar cuenta del porqué de la magra labor parlamentaria, el diario Clarín omite ostensiblemente el rol que jugó el Grupo A en los dos último años. En la nota titulada “Con Cristina, se tocó el piso de leyes votadas por año desde 1983” publicada en su edición de ayer, Clarín se vale de las consideraciones de dos de los principales referentes del Grupo A para explicar la caída en la actividad parlamentaria. Así, el duhaldista Eduardo Amadeo y ex candidato a gobernador en la provincia de Buenos Aires asegura que “la baja producción refleja la consideración del gobierno por el Parlamento. Para los K, un Congreso que se resiste es un Congreso que tiene que estar cerrado”, mientras que para el radical Oscar Aguad “este es un gobierno que ha llevado hasta límites increíbles el hiperpresidencialismo”.

Entre marzo de 2009 y febrero de 2011, y con un Parlamento con mayoría opositora, se aprobaron sólo 181 leyes, mientras que entre 2007 y 2009, los dos primeros años de la gestión de Cristina Fernández se sancionaron 255, un 30% más.

A poco de su nacimiento, el ahora extinto Grupo A fue definido tanto por el presidente del bloque kirchnerista en Diputados, Agustín Rossi, como por su par en la Cámara Alta, Miguel Ángel Pichetto, como “la máquina de impedir”.

El debut mediático y legislativo del Grupo A fue el intento por frenar el uso de reservas para hacer frente a vencimientos de la deuda. A partir de allí, parte de la estrategia de la oposición legislativa fue intentar modificar el modelo económico desde el Congreso, un objetivo que excede las atribuciones del Poder Legislativo. Para ello, intentaron sancionar proyectos propios o impedir deliberadamente el avance de los proyectos enviados por el Poder Ejecutivo.

Bajo la lógica de la oposición sistemática, desde 2009 el arco opositor impidió que el oficialismo avanzara en proyectos como: la Ley de Servicios Financieros, la declaración de interés público de la producción, comercialización y distribución del papel para diario, la Ley de Arrendamiento, la reforma del Estatuto del Peón, la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, el régimen de participación de los trabajadores en las ganancias de la empresas, el Presupuesto 2011, entre otros. Por su parte la mayoría opositora no pudo reformar el Indec, modificar la constitución del Consejo de la Magistratura, eliminar las retenciones a las exportaciones de granos, derogar los superpoderes, coparticipar el impuesto al cheque, eliminar las retenciones ni tampoco imponer su propio presupuesto.

Las diferencias entre los distintos bloques de la oposición se hicieron insalvables. Incluso en su afán por impedir, por primera vez desde el regreso de la democracia la oposición negó la posibilidad de que un presidente contara con el presupuesto para el próximo ejercicio. <

 

 

Tiempo Argentino

 

Saludos y a sus gratas órdnes